En su 57° aniversario, la Asociación Argentina de Automóviles Sport organizó su habitual evento de la fecha patria. Las categorías del Club de Automóviles Sport acompañaron con algunas sorpresas más que el discurso de nuestra presidenta en la Plaza de Mayo.
Durante las pruebas de clasificación del DTNH, Kreutzer marcó el mejor registro en la pista, pero luego sus tiempos fueron retirados por la técnica. Heredó entonces la pole Renato D´Alessandro con su Fiat 125.
Los primeros 7 lugares quedaron encerrados en apenas 605 milésimas.
En GT, los GT1 dominaron la primera fila con José Visir adelante seguido por Julián Diaz de Vivar. La pole de la competitiva clase GT2 fue para la Sierra XR4 de Romanelli, quien celebró este registro con un magnífico locro que circuló por los boxes. Entre los GT3 el mas veloz fue Jorge Lauriti, y además la clase contó con la incorporación de un Peugeot 205 GTi en manos de Marcelo Coletti.
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Momento de la largada del DTNH y su poleman debió retirarse con problemas en su caja de cambios. Semáforo en verde y parecía que esta vez iba a ser de Fiat: Tossone, Saud, Piñeiro y un reaparecido Oubiña fueron acomodandose en los primeros lugares. Pero luego de un toque en la curva 1 entre Tossone y Saud comenzó la debacle de Fiat. Ortiz Basualdo y Albamonte avanzaron como locomotoras con sus Peugeots y se posicionaron en la punta de la carrera escoltados por los Fiat de Piñeiro y de Oubiña. Finalmente resultó ganador Ortiz Basualdo por tercera vez consecutiva en el año, quedando segundo Roberto Albamonte.
La final de la categoría GT fue muy variada como nos tiene acostumbrados en estos últimos años. Al apagarse la luz roja Romanelli se catapultó al primero lugar, comandando todo el pelotón durante las primeras vueltas. Pero el primer lugar iba a pasar por muchas manos antes de caer la bandera a cuadros. Visir, Diaz de Vivar, Zanchetta, Elicabe, Romanelli y Silva conformaron un lote cerrado que no dejaba margen para distracciones, y donde los cambios de posiciones eran constantes. Metros atrás Gowland, Sieleki y Alberti disputaban su propia carrera. Finalmente la bandera a cuadros cayó primero sobre dos
GT1: José Visir y Julián Diaz de Vivar, haciendo valer su superioridad en potencia y adherencia. Luego arribaría el primer GT2, Hernán Silva con BMW 320; el segundo de la misma clase, Eduardo Romanelli con la Sierra XR4 algo herida; y el tercero, Daniel Sanginetto con VW Scirocco MkI. La clase GT3 tuvo varias descerciones entre problemas mecánicos, toques y fuera de pista; encontrandose con la victoria Marcelo Coletti con su flamante Peugeot 205 GTi.
El próximo sábado 20 de junio nos espera otra vibrante competencia en el Roberto José Mouras de La Plata.
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